Este año la Unión Europea se ha fijado como objetivo que la industria vuelva a tener un peso importante en el PIB nacional, como mínimo que alcance el 20%. Los últimos datos del INE revelan que el sector representó el 15,3% en nuestro país, lo que demuestra que queda mucho trabajo por realizar en este ámbito.
Son muchas las voces que ahora reclaman a las instituciones un plan de reindustrialización para España. En este contexto, los centros de datos forman la columna vertebral de este sector, ya que mantienen la economía digital, alojando las “nubes” que soportan nuestros datos.
Es evidente que la sociedad actual se encuentra en un camino permanente hacia la digitalización. Las demandas actuales de la sociedad conectada se ven influenciadas por elementos cotidianos, desde teléfonos móviles hasta medios de transporte que requieren, cada vez más, de una infraestructura de Centros de Datos sólida que sea capaz de sostener estas necesidades.
Existe por tanto una creciente demanda de profesionales expertos en el sector de los Centros de Datos, que sean capaces de desenvolverse de manera rápida y efectiva en un sector complejo, pero en pleno auge. Por tanto, esta reindustrialización solo es posible con talento, y España tiene varios retos por delante en esta materia.
Para atender esta demanda, el sector ya tiene dificultades para encontrar un tipo de talento que es muy específico. En concreto, desde Nabiax identificamos 4 grandes retos en materia de empleabilidad:
A la hora de buscar profesionales que tengan conocimientos de infraestructuras de centros de datos, es indispensable que este sea técnico y profundo, pero las instituciones educativas aún no están completamente preparadas para formar a todos los profesionales necesarios. Los trabajadores deben poseer una comprensión detallada de la arquitectura y el funcionamiento de los data centers, abarcando aspectos que van desde las redes hasta los sistemas de seguridad. Asimismo, la experiencia en la gestión de infraestructuras críticas adquiere un papel crucial, ya que tienen que mantener y operar sistemas y equipos vitales para la continuidad de las operaciones que respaldan la actividad diaria de muchos negocios.
En este entorno altamente tecnológico y dinámico surgen a menudo problemáticas imprevistas. Esto, unido a una fuerte orientación al cliente, hace que la capacidad de resolución de problemas y la flexibilidad sean competencias muy necesarias. Además, los profesionales de esta industria tienen que colaborar con distintos equipos, técnicos y no técnicos, por lo que las habilidades de comunicación son también esenciales.
Para que el talento junior se sienta atraído por este sector, la implementación de programas de mentoría constituye una herramienta imprescindible, permitiendo que los profesionales con menos experiencia aprendan de los que más tienen y absorban conocimientos multidisciplinarios de manera efectiva. La formación continua también es un aliciente para atraer este talento joven, ya que el sector exige un entendimiento técnico de diferentes áreas, en las que constantemente aparecen nuevas soluciones tecnológicas.
Pero más allá de las habilidades técnicas, un enfoque en el desarrollo de habilidades blandas, como la resolución de problemas y la colaboración en equipo, es esencial para construir profesionales holísticos. Asimismo, la rotación de roles entre diferentes áreas puede enriquecer la perspectiva de los profesionales junior, fomentando su versatilidad y ampliando sus conocimientos.
La inclusión de profesionales femeninas en un sector mayoritariamente masculino demanda una serie de enfoques específicos. Para empezar, continuar fomentando la elección de carreras STEM en las niñas impulsará su presencia en sectores como el de los centros de datos, ya que son materias y carreras enfocadas a la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
Por otro lado, continuar con la implementación de políticas de equidad resulta crucial, asegurando que las oportunidades de contratación, ascenso y remuneración sean equitativas para mujeres y hombres. Por último, crear redes y comunidades exclusivas para mujeres en el sector puede brindar un espacio de apoyo e intercambio de experiencias, así como fomentar el networking y las redes profesionales para la mejora de oportunidades contribuirá a reducir la brecha de genero.
Todos estos aspectos presentan un entorno complejo para las empresas del sector, pero por el que las compañías líderes en el sector tenemos que apostar con una oferta atractiva, formación continua y fomento del trabajo en equipo. En el ámbito educativo, más allá de una colaboración público-privada, sin duda debe producirse un cambio en el sistema educativo, que acerque posiciones entre las demandas de empleo de la industria y la formación disponible, para que la red que soporta la industria digital siga siendo igual de robusta.